Después de acabar los trabajos que tenía que hacer este mes he decidido pasar esta última semana sin clase en Santander, tocaba descansar un poco a mitad de trayecto.
Que bien se está, se nota mucho que el turismo es lo que abarrota la ciudad en verano, ahora se ver perfectamente el número de habitantes realmente en la ciudad. Por otra parte el clima, no ha llegado el invierno de verdad. En los tres días que llevo no he notado nada de frío, y llover lo que se dice llover yo creo que no ha llovido demasiado.
Aprovechando este buen clima que os cuento me ha parecido propicio dar un paseo por la playa del camello, con el mar más movido que en Verano y he podido tomar algunas imágenes que con la luz del verano es complicado. Cada día es diferente y en cada ocasión conseguimos algo nuevo.
En la imagen tomada desde la Playa del Camello se pueden ver las rocas de la misma playa y como el mar enfadado rompe con ellas, al fondo se observa la Península de Mataleñas.
Bonita imagen con las olas en movimiento. Me alegro de que estés disfrutando de tu semana libre.
Besos!!
Pues sí, estoy disfrutando mi semana de descanso.
Se consiguen escenas distintas que en Verano, es un gusto ya que casi siempre veo Santander en Verano.
Muchas gracias por el comentario. Un abrazo!